Peter Sposito
La perfecta imperfección
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Pedro González tiende al perfeccionismo, pero su ‘alter ego’, Peter Sposito, le empuja hacia la imperfección. Dos almas conviven en la mente de un diseñador que el año pasado fue reconocido en la MBFWMadrid. Su irrenunciable identidad, donde el historicismo se fusiona con lo urbano, le hicieron merecedor de un galardón que le encumbró como uno de los talentos emergentes de la moda española y le permitió viajar hasta México para presentar su colección: ‘RTW Couture’.
Con una colección inspirada en su infancia, aquella que pasó en las calles de un pequeño pueblo situado al norte de la provincia de Zamora, Peter Sposito, alter ego de Pedro González (San Cristóbal de Entreviñas, 1991), se alzó con el Premio Mercedes-Benz Fashion Talent durante la MBFWMadrid —evento patrocinado por Iberia— celebrada en febrero de 2024. Un año después, Pedro echa la vista atrás y recuerda con especial cariño su participación en la edición mexicana de dicha pasarela el pasado octubre. “El recibimiento fue increíble, no me lo esperaba. Cuando desfilé en Madrid estaba muy nervioso y no lo disfruté del todo, así que en México quería estar más tranquilo y fue mil veces mejor. La gente se acercaba a decirme que les había encantado y ese es el mejor premio”, afirma. Las prendas de Peter Sposito tienen una personalidad arrolladora, fruto de una identidad que bebe de algo tan profundamente humano como la imperfección. “Con mis prendas, que de alguna forma parecen inacabadas, intento representar que somos imperfectos y que no pasa nada porque eso es lo que nos hace humanos y únicos. Lo curioso es que aborrezco la asimetría, así que de alguna manera me obligo a crear prendas no simétricas”, confiesa. Unas prendas que ya han vestido algunas de las artistas españolas más relevantes de la actualidad (Nathy Peluso, Judeline, María José Llergo o Lola Índigo). Pero Pedro no renuncia a soñar y volar más lejos: “Cuando diseño no pienso en una persona en concreto, lo hago en base a una idea y una inspiración. Aunque ojalá pudiera vestir alguna vez a Chapelle Roan, Beyoncé, Lady Gaga, Rosalía o Caroline Polachek”.
Barajaste dedicarte a la danza o a la arquitectura, pero finalmente te decantaste por la moda. ¿Por qué?
Aquello fue en 2010. Ayer casi [risas]. Bailaba en una compañía, pero también leía mucho sobre arquitectura y moda. Ya había hecho alguna prenda, pero sin darle mayor importancia. Cuando murió el diseñador Alexander McQueen, del que era un gran admirador, la noticia me impactó tanto que lo interpreté como una señal. Comprendí que la moda era mi camino. Hoy sigo leyendo sobre arquitectura y yendo de vez en cuando a clases de baile porque lo echo de menos, pero no me arrepiento de la decisión.
El camino en el mundo de la moda no es fácil para un joven diseñador. En los momentos de duda, ¿qué te impulsa a seguir adelante?
Sí, hay muchos momentos de duda, pero siempre bromeo con mis amigos y les digo que, como en la canción de Lady Gaga, yo vivo por los aplausos [risas]. Cuando veo un diseño mío en un videoclip o en una revista me siento supersatisfecho. O cuando desfilo en una pasarela y la gente reconoce mi trabajo. Esos pequeños momentos son los que me impulsan y me hacen olvidar los meses previos, en los que ando desquiciado. Me reconforta y enorgullece ver cómo crece la marca.
“Cuando veo un diseño mío en un videoclip o en una revista me siento supersatisfecho. Esos pequeños momentos son los que me impulsan”
¿Qué sentiste al recibir el Mercedes-Benz Fashion Talent Febrero 2024 por tu colección RTW Couture y qué balance haces un año después?
Cuando me dieron el premio estaba bastante disociado. Terminó el desfile y solo quería celebrarlo con mi familia y amigos, así que me pilló por sorpresa. Un reconocimiento así es una inyección de energía, me sirvió para decirme a mí mismo: “Lo estás haciendo bien”. Esas palmaditas en la espalda son las que te animan a continuar. El balance un año después es que quiero más y para lograrlo necesito seguir creciendo, investigando y aprendiendo, salir de mi zona de confort y no acomodarme.
En alguna ocasión has definido el estilo de tu marca como “historicismo con un toque grunge”. Explícanoslo.
El historicismo siempre va a formar parte de mi estilo porque me gusta mucho la indumentaria medieval, entre otras. También me interesa el mito de Juana de Arco. Somos guerreros del día a día y socialmente nos ponemos una coraza para hacer frente a las adversidades, para luchar y seguir adelante. Me gusta mezclar ese concepto de coraza, más ligado al pasado, con el de calle, más actual. La unión de ambos forma parte de mi ADN como diseñador.
La moda es sinónimo de tendencia, pero tu universo parece operar al margen. ¿Antepones tu identidad a las tendencias?
Sí. Quiero tener una identidad porque es algo que te hace reconocible y prefiero irme a la cama sabiendo que he hecho lo que quiero y no lo que imponen las tendencias. Ser fiel a mí mismo y preservar mi esencia. Ahora hay más diversidad y no hay que tener miedo a ser uno mismo. Aun así, nadie es ajeno a las tendencias y sin querer nos empapamos de ellas.
“Prefiero irme a la cama sabiendo que he hecho lo que quiero y no lo que imponen las tendencias. Ahora hay más diversidad y no hay que tener miedo a ser uno mismo”
¿Qué piensas cuando artistas a las que admiras apuestan por tus diseños?
Es genial. Ver a una persona a la que admiras con una prenda tuya es bastante chocante; una prenda en la que has volcado tu esfuerzo y que ha pasado de estar en tu casa a ser usada en un videoclip o un concierto. La primera vez que vi mi ropa en televisión estaba en un bar tomando algo con unos amigos y uno de ellos me dijo: “¿Te das cuenta de lo fuerte que es?” Y sí, es fuerte ver cómo los sueños se hacen realidad.
¿Qué papel juegan las redes sociales para un talento emergente de la moda como tú?
Las redes sociales visibilizan nuestro trabajo y eso es fundamental. A veces me entra un mail y todavía me sorprendo, me pregunto cómo ha dado esa persona conmigo y la respuesta está en las redes. Gracias a ellas los contactos se producen de forma orgánica porque la gente comparte sugerencias. Además, creativamente son importantes porque sirven para buscar inspiración, conocer lo que hacen otros diseñadores o descubrir nuevos talentos.
“Hay muchos diseñadores jóvenes con talento en España, pero algunos se quedan por el camino porque es difícil mantenerse. He visto a compañeros dejarlo y da mucha pena, mucha rabia”
La sociedad ha normalizado comprar prendas muy baratas y desecharlas pronto, ¿cómo impacta esto en diseñadores emergentes como tú?
No podemos criminalizar a la gente por comprarse una prenda barata. Yo también busco algo económico cuando necesito reponer algún básico. El problema es el consumismo, que es el que impulsa a comprar hoy y desechar mañana. Deberíamos volver a valorar lo especial y perdurable. Y no me refiero a gastarse 2.000 euros en una marca de lujo, me refiero a darle una oportunidad a marcas que por menos te ofrecen algo verdaderamente exclusivo. Para nosotros es un poco frustrante que la gente diga “no conozco esta marca, no la compro”, pero sí esté dispuesta a gastarse el cuádruple en otra porque lleva determinado logo.
¿Cuánto talento hay entre los jóvenes diseñadores españoles?
Hay muchos diseñadores jóvenes con talento en España, pero algunos se quedan por el camino porque es difícil mantenerse. Es bastante sacrificado y necesitas un empujón económico. He visto a compañeros dejarlo y da mucha pena, mucha rabia. Hablando con otros te das cuenta de que es fuera de España donde tenemos más tirón y es incomprensible que te contacten antes desde Estados Unidos, Reino Unido, Corea del Sur o Alemania que desde aquí. Tenemos un talento increíble y ojalá se nos valorara más.