Mundial de ciclismo
Los campeones españoles
El maillot arcoíris, aquel que una vez al año acredita a los mejores, es el más codiciado en el mundo del ciclismo. Ya sea recorriendo carreteras, dando vueltas a un velódromo, atravesando caminos forestales o superando obstáculos, los ciclistas luchan por enfundarse una prenda icónica dentro del deporte. ¿Qué ciclistas españoles han lucido sus colores a lo largo de la historia?
En 1955, en el histórico velódromo Vigorelli de Milán, Guillermo Timoner se convirtió en el primer español en vestir el maillot arcoíris. Lo hizo en una categoría, la de medio fondo tras moto, que el ciclista prácticamente dominó durante una década, proclamándose campeón hasta en cinco ocasiones más (1959, 1960, 1962, 1964 y 1965). Desde entonces, los éxitos del ciclismo español —que cuenta con el apoyo de Iberia a través de la Real Federación Española de Ciclismo (RFEC)— cayeron a cuentagotas hasta el boom del trial a mediados de los 80, al que siguió el resurgir de la pista y la llegada de los primeros triunfos en carretera y mountain bike en los 90 gracias a una serie de corredores que hicieron historia. A continuación, repasamos los nombres de algunos de estos grandes ciclistas y paraciclistas.
Ricardo Ten
El paraciclista valenciano, con catorce títulos mundiales, ya es una leyenda. Y eso que comenzó a competir en 2018, tras colgar el bañador en los Juegos de Río (2016) —sí, cambió la natación por el ciclismo—, ya con siete medallas paralímpicas en su palmarés. Ni que decir que pedalear se le da igual de bien, o mejor, que nadar porque, a sus éxitos mundiales en pista (persecución, ómnium, scratch) y en carretera (fondo, contrarreloj), hay que añadirle otras cuatro medallas paralímpicas, las últimas tres logradas en París.
Óscar Freire
En 1999, un ciclista cántabro prácticamente desconocido dio la sorpresa en Verona (Italia) y se proclamó campeón del mundo de fondo en carretera superando en la línea de meta a corredores de la talla de Markus Zberg, Oscar Camenzind o Jan Ullrich. En 2001 repetiría batiendo al sprint a Paolo Bettini en Lisboa y en 2003, con su tercera victoria —de nuevo en Verona—, pasó a la historia convirtiéndose en el cuarto corredor, tras Alfredo Binda, Rik Van Steenbergen y Eddy Merckx, en conquistar tres Mundiales.
Marga Fullana
Si hablamos de ciclismo, tenemos que hacerlo de mountain bike, una modalidad en la que los corredores recorren circuitos naturales en plena naturaleza. Marga Fullana, con cinco títulos, es la mujer española más laureada en los Mundiales. Los primeros maillots arcoíris se los enfundó en Åre (Suecia), donde ganó tanto en individual como en relevos. Un doblete que repitió en el 2000, en unos campeonatos celebrados en Sierra Nevada (España). Su último título se hizo esperar hasta 2008, en Val di Sole (Italia).
Joan Llaneras
El rey de la pista, y no por sus dotes para el baile. El mallorquín es el mejor ciclista en pista español con siete títulos mundiales, a los que tenemos que sumar dos oros olímpicos, los logrados en Sídney (2000) y Pekín (2008). Sus siete arcoíris se dividen de la siguiente forma: cuatro en la categoría de puntuación (Mánchester 1996, Burdeos 1998, Mánchester 2000 y Palma de Mallorca 2007) y tres en madison junto a Miquel Alzamora (Perth 1997) e Isaac Gálvez (Berlín 1999 y Burdeos 2006).
Gemma Abant
Con tres títulos mundiales, es la reina española del trial, una modalidad nacida en España de la mano del padre de Ot Pi, otro gran campeón, que se basa en ir salvando obstáculos realizando el mínimo número de apoyos con los pies. Su reinado comenzó en 2008 en Val di Sole (Italia), continuó en Mont-Sainte-Anne (Canadá) en 2010 y finalizó en Saalfelden Leogang (Austria) en 2013. Como curiosidad, su hermana gemela Mireia también cuenta con cinco medallas en Mundiales.
Abraham Olano
El épico, por durísimo, Mundial de Duitama (Colombia) de 1995 fue histórico para el ciclismo español y sus imágenes aún permanecen grabadas en la retina de los aficionados. Olano se colgó el oro en ruta y la plata en contrarreloj, mientras que Miguel Induráin se llevó la plata en ruta y el oro en contrarreloj. ¡El dominio español fue aplastante! En 1998, en el Mundial de Valkenburg (Países Bajos), el guipuzcoano completaría su palmarés con otro título, esta vez en contrarreloj.
José Antonio Hermida
Junto a Marga Fullana, José Antonio Hermida es la otra gran figura que ha dado el mountain bike en España. Criado a los pies de los Pirineos —Puigcerdà (Girona)—, en 1996 se proclamó campeón del mundo júnior. Ya en categoría élite conquistó cuatro títulos mundiales, tres en la prueba de relevos (1999, 2000 y 2005) y uno en individual (2010), en una final que se decidió por solo 29 centésimas y que supuso el gran hito de su carrera junto a la plata lograda en los Juegos de Atenas (2004).
Joane Somarriba
El mismo año que Igor Astarloa se proclamaba campeón del mundo de fondo en carretera en Hamilton (Canadá) rompiendo todos los pronósticos, su paisana, un mito del ciclismo femenino español, marcaba el mejor tiempo en la categoría de contrarreloj. Un 2003 en el que Joane, además de vestirse con el arcoíris, conquistó su tercer y último Tour de Francia —denominado Grande Boucle en aquel momento—. Un palmarés de lujo que se completa con dos Giros de Italia.
No nos olvidamos de figuras como la de Alejandro Valverde, que logró su anhelado arcoíris con 38 años en el Mundial disputado en Innsbruck (Austria), ni tampoco de pistards como Dori Ruano o Sergi Escobar. Pero si España destaca en una disciplina esa es el trial, donde ciclistas como Benito Ros o Abel Mustieles han sido auténticos dominadores. Y no podemos terminar sin citar a otros paraciclistas, como Alfonso Cabello o Javier Otxoa, que pasó de coronarse en Hautacam en el Tour del 2000 a ser campeón mundial de contrarreloj en 2009 tras el grave atropello que truncó su carrera en 2001. Todos ellos son historia del ciclismo español… ¡y mundial!