Daniella Santiago
El papel de su vida
Se estrena con Almodóvar en ‘Madres Paralelas’, una película en la que comparte pantalla con Penélope Cruz. No cabe duda de que Daniella Santiago es una de las actrices del momento. Tras dar vida a La Veneno, la malagueña y ganadora de un Ondas se ha convertido en abanderada de la visibilidad trans en la pantalla y sobre la alfombra roja.
Hace tres años, Daniella Santiago (Málaga, 1982) estaba de vuelta en su ciudad natal, donde trabajaba como maquilladora y peluquera, y nada hacía presagiar que acabaría convirtiéndose en chica Almodóvar. Pero el destino y su talento hicieron que “los Javis” la eligiesen como una de las protagonistas de su serie Veneno, uno de los primeros personajes que dieron visibilidad al colectivo trans. “Estaba retirada de los focos cuando surgió esta oportunidad. Le dije a mi madre que me iba a Madrid a hacer realidad el sueño de mi vida”, confiesa la intérprete.
A partir de ese momento, el ascenso de Santiago en la industria ha sido meteórico. Hoy cuenta con un premio Ondas y su nombre ha llegado hasta el otro lado del océano. En menos de dos años, la actriz se ha convertido en un icono del feminismo y la igualdad en la industria cinematográfica. Acaba de entregar uno de los Premios PLATINO, la gran cita del cine y la televisión iberoamericana, en la gala celebrada en Madrid. Para ella, ambos lugares —España y Latinoamérica— comparten un sentimiento. “Cuando una película te llega, se siente por igual, ya sea aquí, en México o en cualquier otro lugar. Lo que tenemos en común es el corazón”, asegura la actriz, que espera vivir el sueño de su vida haciendo volar su talento hacia otras fronteras.
¿Te enorgullece haber entregado uno de los Premios PLATINO? ¿Es una forma de reconocimiento?
Mi carrera hasta el momento ha sido meteórica. He pasado de ser peluquera en Málaga a ganar un Ondas, trabajar con Almodóvar y entregar el Premio PLATINO a la Mejor Miniserie o Teleserie Cinematográfica Iberoamericana. Me ha cambiado la vida muy rápido y de una manera muy bonita. Siempre he llevado muy arraigada la interpretación, pero no había podido ejercerla hasta hace dos años. Para mí supone un orgullo empezar a moverme en el ámbito de la cultura y el cine, algo que he deseado durante toda mi vida.
¿Más allá de los focos, qué importancia tiene el reencuentro físico sobre la alfombra roja en los festivales y estrenos?
Significa mucho. Ser fuerte en la alfombra roja demuestra que la industria comienza a ser inclusiva. Es dar visibilidad a un colectivo que antes no la tenía o no se conocía tanto. Y en nuestro caso, que rodamos Veneno en plena pandemia, sin ni siquiera una première, aún más.
Esa visibilidad la has conseguido también gracias a la serie Veneno. ¿Cómo ha acogido el mundo la historia de Cristina?
Creo que hemos traspasado fronteras. Realmente La Veneno ha cruzado el Mississippi, se ha expandido y ha dado la vuelta al mundo. No solo en Latinoamérica, también en Estados Unidos. Acabo de retuitear un post de Australia, allí ya se está hablando sobre el fenómeno Veneno y jamás pude imaginarlo cuando grabábamos la serie. Ha sido un trabajo muy personal, porque no solo fue su vida, también la de muchísimas Cristinas. Hay que darle voz a esta historia y luchar por el colectivo y por todas las personas que lo han pasado mal. Que triunfe La Veneno, que la gente la apoye y la quiera me llena de satisfacción. Siento que hemos realizado un trabajo enriquecedor a nivel personal y colectivo.
“Veneno ha sido un trabajo muy personal, porque no solo fue su vida, también la de muchísimas Cristinas. Hay que darle voz a esta historia”
Se acaba de estrenar Madres Paralelas, la cinta de Almodóvar en la que apareces junto a Penélope Cruz. ¿Qué ha supuesto para ti esta experiencia?
Es otro regalo del Universo. Siento que he sido tocada por una varita mágica, ya que he comenzado trabajando en esto con los grandes de España. Primero, chica Javis, ahora chica Almodóvar. No todo el mundo lo puede decir.
¿Qué lectura haces de tu trabajo con Almodóvar y Penélope?
La primera vez que tuve contacto con ellos fue en la película de Todo sobre mi madre, en la que hice de extra. A raíz de ese día, soñé con que llegase el momento de trabajar junto a los dos. Cuando me llamaron de El Deseo (la productora de Almodóvar) porque querían ofrecerme un pequeño cameo con Penélope Cruz en Madres Paralelas, no me lo creía, me quedé impresionada. Ha sido un regalo, siento mucho respeto por su trabajo.
Ambos cuentan con un talento incuestionable, ¿cómo defines tú el talento?
Significa que una persona transmita, que emocione en cualquier ámbito… El talento es algo que se lleva, se palpa y se siente, no se puede explicar con palabras.
No solo eres una de las actrices del momento en el cine y la televisión, también te reclama la pasarela, ¿es otra vía para llegar al público?
Participé en la última edición de la Fashion Week de Milán, en el desfile de Roberto Cavalli. El año pasado también protagonicé su campaña y la de Desigual. Estoy feliz con esta faceta. Sobre una pasarela caminas con una presencia determinadas o te pautan una especie de coreografía. Siempre tienes que actuar.
La oportunidad de interpretar llamó a tu puerta de forma inesperada, ¿es algo que valoras ahora más que si hubiese sucedido antes?
Creo que todo esto me ha llegado en el momento y en la edad perfectos. Cuando era más joven quizá no valoraba tanto los logros y era más alocada. Trabajé en la industria de la moda cuando tenía 22 años, pero nunca en interpretación. Estoy en plena madurez, pero me veo muy bien y con ganas de hacer todo aquello que no he podido abarcar hasta ahora.
“Creo que todo esto me ha llegado en el momento y en la edad perfecta. Cuando era más joven quizá no valoraba tanto los logros y era más alocada”
¿En qué proyectos te encuentras inmersa estos momentos?
Participaré en un par de películas que se empezarán a grabar en abril. Y repito con Miguel Ángel Olivares, con quien rodé el documental Julia y vamos a hacer Julia, la película. También grabaré otra cinta que podría catalogarse de fantástica. Será en la Alpujarra granadina y aunque no puedo contar mucho más, ya se está gestando el proyecto.
¿Te gustaría hacer volar tu talento hacia otras fronteras?
Tengo muchas ganas de adentrarme en Latinoamérica y Estados Unidos. Me imagino viajando y explorando rincones que me sorprendan y emocionen, quién sabe si por México o por España. Pero me apetecería mucho expandirme, salir de mi zona de confort y probar nuevos destinos.