Mercules
Bolsos de siempre con un toque canalla
A punto de cumplir una década en el mercado, Mercules ha pasado de ser la firma de ‘los bolsos de la flecha’ que triunfaba en las redes sociales a convertirse en una sólida marca con un complejo universo creativo a sus espaldas.
La diseñadora vasca Mercedes Gallego ha creado una de esas firmas que desde el primer momento empiezan a correr de boca en boca y por la red hasta convertirse en una marca de culto. Desde su lanzamiento en 2010, los bolsos de Mercules –cuyo logo es una flecha dorada– han cautivado al público más exigente fuera y dentro de España, con un diseño fresco a la vez que ortodoxo. La calidad de las pieles empleadas, salidas de las mejores curtidurías nacionales, no tardaron en situarla entre las firmas más punteras de la piel de toro. Hoy, Mercules ya no es solo sinónimo de bolsos de calidad artesana hechos a mano en España, es también nombre de calzado, bisuterías, cinturones y otros accesorios, e incluso de objetos para el hogar.
Ahora, junto a sus socias Alejandra O’Shea, estratega empresarial, y Gabriela Laiseca, al mando de la comunicación, Gallego se enfrenta a un momento dulce de consolidación y expansión de la firma, cuyos límites solo los pone la imaginación. La flecha dorada apunta más lejos que nunca.
De tu currículo destaca, junto a tu formación en la escuela Central Saint Martins, tu paso por Loewe, Galliano y Massimo Dutti, ¿qué es lo esencial que aprendiste en estas tres empresas?
Tuve la suerte de que mi primer trabajo fuera en el estudio de John Galliano. En aquella época, él estaba al frente de Dior y fue una etapa supercreativa y sin límites en la que aprendí que todo lo que pasa por tu cabeza puede convertirse en algo real. En cuanto a mi paso por Loewe, tengo que decir que fue mi primer contacto con el mundo de los accesorios y el lugar en el que me enamoré para siempre de la artesanía y la piel. Por último, Massimo Dutti supuso para mi formación todo un máster en pronto moda, en búsqueda de proveedores y en desarrollar producto sin parar. Fue una etapa menos creativa pero, aun así, muy interesante.
¿Por qué decidiste que tenías que empezar a trabajar para ti misma?
Echaba de menos la libertad del proceso creativo y siempre había tenido en la cabeza crear algo que fuera mío al cien por cien.
Empecemos por el principio. ¿Por qué te decidiste por los bolsos y no por otra línea de producto de moda para empezar tu andadura con Mercules?
Porque es en lo que me había especializado. Amo los objetos y, para mí, un bolso es el objeto de moda por excelencia. Son como esculturas en las que puedes llevar tus cosas de paseo.
“Un bolso es como una escultura en la que puedes llevar tus cosas de paseo”
¿Cómo es tu proceso creativo y de fabricación?
Me gusta llegar al taller sin tener las ideas claras, en blanco. Me siento delante de las pieles que he elegido previamente y empiezo a desarrollar volúmenes. Y de ahí van saliendo creaciones que luego voy modificando. Intento ser fiel a mí misma en todo lo que engloba el proceso. Desarrollo solo cosas que me gustaría llevar a mí, sin dejarme influir por lo ajeno, y las fabricamos en un taller pequeño de manera consciente y sostenible. Esto me hace feliz y, por otro lado, hace que el proyecto sea más auténtico.
Y desde el punto de vista del cliente, ¿qué crees que ven en tus creaciones —concretamente en tus bolsos— que consigue engancharles?
Intentamos ser lo más cercanas posible, lo que hace que nuestros clientes se sientan identificados con la marca. Intentamos también ofrecer un producto clásico, pero con un punto rockero que lo hace más original.
Mercules ya no es solo una ‘firma de bolsos’, sino que habéis crecido con muchas otras líneas de producto. ¿Cuál es la última que has introducido o la próxima que veremos con tu firma?
La idea es crear un universo de marca. Ahora mismo estamos ampliando la línea de calzado y vamos a continuar con los sombreros. Lo próximo que lanzaremos será una colección para el hogar, ¡pero por ahora no puedo hablar mucho!
¿Qué te lleva a introducir un nuevo producto en tu universo?
Vamos desarrollando productos según vamos conociendo proveedores que nos cautivan. Para nosotras es muy importante el proceso de fabricación.
¿Es complicado hacer un producto competitivo (a nivel de rentabilidad, obviamente) con producción a mano y made in Spain?
Todo tiene su misterio, pero es nuestro trabajo intentar equilibrarlo todo para que nos compense en diseño, precio y sostenibilidad.
“Fabricamos nuestros productos en un taller pequeño de manera consciente y sostenible, lo me hace feliz y hace el proyecto más auténtico”
Actualmente contáis con dos tiendas propias, en Getxo (Vizcaya) y en Madrid.
Sí, siempre he tenido claro que una tienda es el mejor escaparate. El contacto directo te ayuda a conocer mejor a tus clientes. Es como invitar a gente a tu casa para que te conozcan mejor.
¿Cuál es tu visión general de la moda española? ¿Crees que está en un buen momento?
Creo que hay marcas maravillosas que lo están haciendo muy bien a nivel nacional e internacional. Como marca pequeña o en crecimiento, muchos de nuestros esfuerzos los enfocamos a internacionalizarnos al máximo. Por supuesto, siempre hay cosas que se pueden mejorar, como las ayudas a marcas con menor visibilidad o el fomento de la fabricación sostenible.
Las creaciones de Mercules se realizan en un pequeño taller de Vic, Barcelona. © Cortesía de Mercules
