Silvia Navarro

La guerrera incombustible

24 Julio 2019 Por Iñigo Esteban
slvia navarro balonmano apertura
Silvia Navarro, capitana de la Selección Española de Balonmano Femenino, lleva más de 20 años defendiendo la portería nacional y mira con ilusión al Mundial de diciembre. © RFEBM

El Mundial de Japón este diciembre, el de España en 2021, entrar en el top 5 de jugadoras con más partidos en la selección femenina de balonmano… Son algunos de los objetivos que vislumbra en el horizonte la capitana del equipo nacional, Silvia Navarro. La veterana guardameta no sabe si los alcanzará todos, pero habla sobre ellos con la misma ilusión con la que continúa, dos décadas después, defendiendo sus ‘tres palitos’, que es como esta deportista se refiere a la portería.

A Silvia Navarro (Valencia, 1979) no se le agotan las fuerzas a la hora de promover el deporte femenino y aún le queda tiempo para disfrutar de su hogar, compaginando así vida familiar con una larga y prolífica historia en la cancha que parece no tener fin. Sepamos cómo lo hace.

Debutaste con la Selección Española de Balonmano Femenino en 1998. Después de veinte años, ¿qué se necesita para mantenerse tanto tiempo al más alto nivel?

Creo que se necesita un poco de todo. El cuerpo me respeta y la ilusión no se me acaba, aunque con 40 años necesito un poco más de cuidados. Eso, unido a hacer deporte y llevar una vida sana, es lo principal.

Y en estos años ¿cómo ha evolucionado el balonmano femenino español?

Ha habido mucho cambio. Antes se trabajaba de otra manera. Las nórdicas eran las punteras a nivel técnico y físico, pero en estos años el balonmano femenino español se ha ido equiparando con ellas. Cada año se mejora, hay muchísimo más trabajo en la preparación de partidos y entrenamientos y se nota. Hemos dado un pasito hacia adelante muy importante a lo largo todos estos años.

¿Se fomenta lo suficiente el deporte y el balonmano femenino?

No estamos equiparadas a los chicos. Aún estamos a años luz. Se van dando pasitos que parecen muy grandes, pero son pequeñitos. Sí es verdad que hay muchísima más cobertura que la que había hace unos años y espero que vaya a más, porque hay que dejar un buen legado para las generaciones que vienen. Hay que mirar hacia adelante y seguir sumando.

Sois conocidas como Las Guerreras, un apodo con el que dicen que os sentís identificadas.

El apodo de Las Guerreras surgió cuando conseguimos el bronce en el Campeonato del Mundo de Brasil de 2011 y logramos la plaza para el preolímpico. La Federación lo organizó en Guadalajara y ahí nació. Nos jugábamos la vida, el estar en unos JJ. OO., y nos apodaron Las Guerreras en ese momento y hasta hoy. Fue la propia Federación la que nos lo puso y nos viene como anillo al dedo, porque podemos tener carencias o ser inferiores técnicamente a otros equipos, pero lo suplimos con garra. Tenemos mucho genio y mucho carácter y ese es el puntito que nos ayuda a competir cada partido.

Eres madre, ¿cómo se compagina la vida familiar con el deporte de élite?

No es tan complicado. Las ausencias por los viajes es lo que más mella hace. Hay veces que hasta me quieren poner una foto en la nevera de casa porque me dicen: “Te pasas un mes y medio con la selección y no te vemos”. Los hijos van creciendo y te das cuenta de que pasas mucho tiempo fuera de casa, pero se puede compaginar perfectamente. Yo, por ejemplo, entreno con mi equipo por las tardes y por las mañanas tengo un preparador físico para mí e intento compaginar maternidad y deporte de élite de la mejor forma posible. Si tienes una buena base familiar, es totalmente compatible.

“No sería justo, ni como profesional ni como deportista, ir arrastrándome a la selección solo para cumplir un número de internacionalidades”

Se acerca el Mundial de Japón. ¿Qué expectativas tenéis?

Nos lo planteamos pasito a pasito. Carlos Viver (entrenador de la Selección Española de Balonmano Femenino) siempre nos lo dice. Era muy importante conseguir la clasificación contra Islandia, que no era nada fácil. Ahora toca pensar en hacer el mejor papel posible. Tenemos que ser conscientes de que el Mundial nos puede dar plaza para los JJ. OO. de Tokio o para poder organizar un preolímpico y sabemos que nos jugamos la vida en el Mundial de Japón.

Como veterana y capitana, ¿las sensaciones antes de un gran campeonato con la selección son diferentes a las de tu primera vez?

A nivel deportivo la esencia es la misma. Sí que es verdad que ha habido muchísimos avances a nivel mediático. Todo es mucho más a lo grande y todo ha ido mejorando: las jugadoras, el nivel de juego, las organizaciones y la puesta en escena... Hoy en día es todo mucho más especial en ese sentido. Un Mundial como los de ahora hace unos años era algo inimaginable. Personalmente, sigo poniéndome igual de nerviosa que el primer día que jugué con el equipo nacional. Sigues sintiendo los nervios por si juegas o no, si estás en el campo o en el banquillo. Tú sales a competir y la sensación es igual que la primera vez.

Aunque rozas las 200 internacionalidades, los 301 partidos que jugó Marta Mangué con la selección parecen una marca inalcanzable, pero ¿entrar en el top 5 de jugadoras con más partidos con España es uno de tus objetivos?

Marta Mangué es una fuera de serie y lo ha conseguido todo. ¡Qué te voy a decir yo de Marta! Es la jugadora que más renombre tiene en la selección. Yo no pienso en alcanzarla, sino en estar bien. Si Carlos Viver quiere contar conmigo, estaré dispuesta, siempre y cuando el cuerpo me aguante y no me falten las ganas, y llegaré hasta donde pueda. No pienso en alcanzar tantas internacionalidades, sino que me centro en el día a día y en estar en las mejores condiciones. No quiero ir arrastrándome al equipo nacional simplemente por querer llegar a un número concreto de partidos con la selección. No sería justo, ni como profesional ni como deportista.

Y el Mundial 2021 se celebra en España y será muy especial. ¿Podría ser el final de Silvia Navarro en la selección?

No lo sé. No sé si llegaré, si contarán conmigo… Lo que sí tengo claro es que el Mundial de España va a ser muy especial para las jugadoras que vayan y que lo tienen que disfrutar. Será una gran oportunidad para que la gente de aquí lo vea.

Con una carrera tan extensa ¿qué es lo mejor que te ha dado el balonmano?

Tengo buenísimos recuerdos a lo largo de mi carrera. El debut, cuando gané mi primera liga, el bronce mundial con la selección, el subcampeonato de Europa, el bronce olímpico de Londres, los dos títulos con mi equipo de este año… Soy una afortunada. Independientemente de los títulos, el balonmano es una recompensa y ha sido y sigue siendo mi vida.